La luz, elemento fundamental de nuestra existencia, pero sin embargo nos ha llevado mucho tiempo en asumir la importancia que desempeña en los edificios que los arquitectos proyectan y construyen.
Se debe tener en cuenta desde el inicio de un proyecto, pero no se basa tan sólo en calcular niveles de lux o elegir una lámpara u otra por su estética en vez de por su cualidad lumínica.